- Dos pechugas de pavo (pueden ser de pollo o pato).
- Dos cebollas.
- Seis dientes de ajo.
- Dos hojas de laurel.
- Aceite de oliva.
- Vino blanco.
- Sal.
- Dos patatas.
1. Salar las pechugas.
2. Poner una cazuela al fuego con aceite de oliva en el fondo, y colocar las pechugas, las cebollas cortadas a tiras, el ajo troceado y el laurel.
3. Dorar a fuego medio, dándole vueltas a las pechugas.
4. Cuando la cebolla dore en el fondo, echar un chorro de vino blanco y dejar cocer hasta evaporar alcohol.
5. Aparte, freír las patatas, peladas y troceadas en dados. Cuando doren, sacarlas, escurrirlas y echar a la cazuela sobre las pechugas.
6. Mover un poco, apartar y servir caliente.